Kota Takamura vive una vida aparentemente tranquila hasta que su padre se vuelve a casar, trayendo consigo a Aika, su nueva hermanastra. Frente a sus padres, Aika se muestra amable y encantadora, pero en privado su comportamiento travieso y provocador genera constantes conflictos con Kota. A medida que la convivencia forzada continúa, ambos comienzan a conocerse más allá de las apariencias y las tensiones familiares, dando lugar a situaciones cómicas y románticas de alto contenido adulto.